CULHUACAN
Pueblo milenario
Por la difusión y conservación del patrimonio, cultura, historia, tradiciones y demas formas de vida de los barrios del pueblo de culhuacán.
Fiestas y tradiciones
Sr. del Calvario
Foto: Oscar Noé Ayala Figueroa
Grupo Cultural Culhuacán
Foto: Archivo fotográfico
Grupo Cultural Culhuacán
A pesar de que todos los barrios cuentan con sus iglesias la más importante y la que contiene mayor simbolismo es la del Señor del Calvario, construcción hecha sobre restos prehispánicos que de acuerdo con las investigaciones consta de partes del siglo XVII, hecho confirmando por inscripción que se encuentra dentro de la cueva del recinto y que hace referencia al año de 1672; todo lo anterior muestra la importancia que el lugar ha tenido desde tiempos precolombinos.
El Señor del Calvario es una imagen del Santo Entierro que según la leyenda, tuvo su aparición en una cueva del Cerro de La Estrella y fue encontrada por los canteros de Culhuacán. La santa imagen está hecha de diversos materiales, es de color oscuro, mide cerca de dos metros y tiene movilidad en sus principales articulaciones. Pese a que San Juan Evangelista ha sido el santo patrono de Culhuacán desde el siglo XVI, el Señor del Calvario es considerado como el patrono más importante de los ocho barrios , por lo que con el transcurso del tiempo ha adquirido mayor importancia que San Juan.
Durante el año el Señor es llevado a las fiestas patronales de cada uno de los barrios, es decir, visita a la gente de sus barrios durante su fiesta patronal. Regularmente es trasladado ocho días antes de la fiesta y ahí permanece hasta la octava, cuando es regresado a su capilla; por esta razón es difícil encontrarlo en su iglesia la mayor parte del año.
Algunos vecinos de la comunidad cuentan haber visto durante las noches al Señor vigilando a sus barrios desde el atrio y también se dice que sale de su recinto para visitar a su pueblo, debido a que en algunas ocasiones se aprecian residuos de tierra en las escaleras del altar.
En la presente época Culhuacán vive diariamente sus usos, costumbres y tradiciones, manifestaciones que pueden observarse a través de su vasto ciclo ceremonial que consta de más de 60 fiestas anuales, de las cuales podemos mencionar como las más importantes:
1. Festividad de la Santísima Trinidad.
2. Fiesta Patronal de San Juan Evangelista.
3. Fiesta de San Salvador.
4. Fiestas Patronales de Los Barrios.
También durante este ciclo festivo podemos mencionar las peregrinaciones que se realizan al Santuario del Señor de Chalma en el mes de agosto, a la Basílica de Guadalupe el último viernes de noviembre y fiestas dedicadas a otros santos como la Virgen de la Candelaria, la Virgen del Carmen, a la Santa Cruz o al Señor de La Salud. De igual forma destaca la conmemoración del Carnaval, la Semana Santa y la celebración de las enchiladas a otro día de celebrarse una boda.
Es importante remarcar que muchas de las imágenes de los diferentes santos venerados en el pueblo, tales como El Señor de Chalma, el Mayorcito, La Virgen de Guadalupe, los Santos Patronos de los barrios etc., son también santos peregrinos, es decir, andan de casa en casa durante todo el año. Estas visitas son realizadas cada ocho días, cada tercer día o incluso diariamente. Antes de que el santo sea llevado a la siguiente casa se realiza un rosario y al término de éste, es trasladado a su siguiente morada acompañado de cantos y cuetes. Al llegar a la siguiente casa la familia lo recibe con incienso, adornos, flores etc., y da a los asistentes desde pan de dulce hasta comida de fiesta como pozole o carnitas; todo dependiendo de las posibilidades económicas de cada familia.
Si tomamos en cuenta la gran cantidad de santos que visitan día a día las casas de los habitantes de Culhuacán y el vasto ciclo de fiestas de la comunidad, podemos darnos cuenta de que prácticamente durante todo el año el pueblo se encuentra en constante fiesta.
Lo anterior se lleva a cabo con el apoyo de las diferentes mayordomías, quienes tienen un compromiso con Dios y la comunidad. Es pertinente aclarar que todas tienen el mismo grado de importancia y ninguna se encuentra por encima de las demás.
Otra característica de este pueblo son sus ritos funerarios ya que al momento de que una persona muere de inmediato la familia cumple en acompañar a los deudos llevando siempre apoyo moral, económico y en especie. Durante el velorio el alabancero mediante sus cantos encamina al difunto en su viaje a la eternidad y a los acompañantes se les ofrece café y pan.
Al día siguiente el difunto es cargado en hombros rumbo al panteón, aunque previamente pasa a las casas de sus familiares más cercanos, a la capilla de su barrio y a la iglesia del Sr. Del Calvario para despedirse. La comida que se sirve en estos casos es por lo regular charales en chile verde con nopales y papas, arroz, frijoles, tortillas y agua. Después del entierro se realiza un novenario donde también se ofrece comida y al término de éste se hace una misa en la cual se lleva una cruz al camposanto.
A pesar de que la zona de los culhuacanes ha sufrido grandes cambios a lo largo de su historia, de las inconformidades de los avecindados, automovilistas y en general de todos los obstáculos, se ha caracterizado por mantener viva su ritualidad, costumbres y tradiciones. Es así como en las últimas décadas la población ha logrado mantener un fuerte sentido de cohesión e identidad que han permitido que Culhuacán siga existiendo en los albores del siglo XXI.
Foto Archivo fotográfico Grupo Cultural Culhuacán
Foto Archivo fotográfico Grupo Cultural Culhuacán
F. Rosas Nequiz
Foto Archivo fotográfico Grupo Cultural Culhuacán
Canto tradicional entonado por los alabanzeros
Archivo Aculhuas